Fuentes jurídicas, que han confirmado la detención de estas dos personas, ya habían informado de que los investigadores habían conseguido estrechar el cerco sobre los sospechosos y a su posible integración en una red criminal dedicada al robo que captaba a sus víctimas a través de una aplicación de contactos y de una mujer utilizada como cebo.
Una posibilidad que se deriva de la existencia de dos denuncias previas de hombres que aseguraron haber sido víctimas del mismo engaño mediante el mismo método en la provincia de Zaragoza pero que, sin embargo, salvaron sus vidas tras ser golpeados y amordazados apunta al mismo grupo criminal.
José Antonio Delgado se desplazó el pasado 6 de septiembre a la capital aragonesa y contactó con la mujer, que le pidió que le llevara a un sitio apartado para mantener el encuentro sexual y en el que se vio sorprendido por tres hombres que le asaltaron a golpes.
Al parecer, la víctima, informático de profesión, separado y con un hijo, murió a consecuencia de los golpes recibidos por sus asaltantes, que finalmente lo metieron en el maletero de su vehículo para enterrarlo a las afueras de la localidad zaragozana de Pedrola, donde fue descubierto semienterrado hace unos días por un vecino que paseaba por la zona.