Según ha informado el Sindicato de Policías Locales de Castilla-La Mancha, el suceso tuvo lugar el pasado sábado sobre las 11:30 horas en la plaza de San Vicente, donde un joven que se encontraba en un grupo con otros dos chicos y otras dos chicas pinchó la rueda de un vehículo policial estacionado con una navaja, con la que también amenazaron a un turista que les recriminó esta acción.
Al mismo tiempo profirieron amenazas indicando que "iban a cometer un atentado y que no iba a quedar ni un policía", por lo que se activaron los dispositivos disponibles y, media hora después, gracias a la colaboración ciudadana, fueron interceptados en la calle Cordonerías, también en el casco antiguo, por una dotación de agentes de movilidad.
Al pretender identificarlos, los jóvenes, jaleados por sus amigas, trataron de huir del lugar y en el forcejeo que mantuvieron con los agentes de movilidad y las patrullas de Policía Local que pretendían inmovilizarlos, sufrieron contusiones y luxaciones dos agentes de movilidad y un policía.
El Sindicato de Policías Locales ha agradecido la colaboración ciudadana que ha permitido interceptar y detener a estos jóvenes que demostraron en todo momento una actitud "muy agresiva", evitando así que se pudiera dar un nuevo episodio violento empleando la navaja que ya habían utilizado.
Igualmente, el sindicato policial ha expresado su "repulsa a todo mensaje de violencia y amenaza, máxime cuando ésta es de un atentado", y su deseo de que los compañeros lesionados se recuperen lo antes posible.
Por último, han indicado que desde el Sindicato de la Policía Local seguirán trabajando "por la seguridad de los agentes de Toledo", defenderán que, "por seguridad no se pueden establecer servicios individuales" y seguirán reclamando un incremento de plantilla y una especialización, promoción y formación interna de los profesionales que permita realizar nuestro trabajo "con todas las garantías" para los toledanos y para ellos mismos.