La Dirección General de Tráfico tiene como objetivo reducir el número de accidentes y muertes en las carreteras de España, para lo que ha modificado y rebajado la tasa de alcoholemia en el nuevo Reglamento General de Conductores. Esta reforma se ha estado gestando durante los últimos meses, y podría entrar pronto en funcionamiento.
El objetivo principal de esta rebaja es evitar el incremento de fallecidos en las carreteras de nuestro país, disminuir las conductas de conducción agresiva, reducir el consumo de alcohol y drogas al volante, los excesos de velocidad y enviar un mensaje para el uso correcto de todo tipo de vehículos.
¿A quiénes afecta la rebaja?
Esta nueva reducción de la tasa de alcohol al volante va dirigida a los profesionales: transportistas, taxistas, conductores privados, entre otros. Con esta novedad, obligan a no probar una gota de alcohol antes de conducir.
Las sanciones económicas oscilarán entre los 500 y 1.000 euros, a la que se aplicaría un 50% si se efectúan antes de 20 días naturales.
¿Cuál es la rebaja de la tasa?
La Dirección General de Tráfico ha elegido al colectivo de profesionales al volante para ser el primero en estrenar el nuevo límite en la tasa de alcoholemia. La cifra, que estaba fijada en 0,25 mg/l, se reducirá hasta los 0,10 mg/l del alcohol por litro de aire espirado, lo que supone menos de la mitad en comparación con los anteriores datos.
Además, la DGT recuerda con frecuencia a los usuarios la cantidad de alcohol que se puede consumir para no exceder la tasa en un control, en función del peso del mismo y explica las posibles consecuencias.
¿Una rebaja al 0,0?
La nueva modificación de la DGT en la tasa de alcoholemia implica, prácticamente, evitar tomar una única cerveza o vino. Con la rebaja a los 0,10 mg/l, obligan a los conductores a no probar una gota de alcohol si no quieren tener problemas con la Ley en caso de enfrentarte a un control de Tráfico.
