El secretario de Salud Pública de la administración autonómica ha asegurado que no temen por la salud de estos dos técnicos, que no presentan ningún síntoma de la enfermedad, pero en aplicación del "principio de precaución", la Agencia de Salud Pública de Cataluña (ASPCAT) los mantiene bajo vigilancia.
El pasado 25 de agosto, un hombre de 62 años falleció en Madrid tras contagiarse del virus de la fiebre hemorrágica Crimea-Congo a través de la picadura de una garrapata, mientras la enfermera contagiada -que lo atendió en la UCI- está "estable dentro de la gravedad".