Echániz, encargado de defender en el pleno de este martes el rechazo de su grupo a la proposición de ley de regulación de la eutanasia, ha dicho a los periodistas que, aunque el PSOE no lo reconozca, detrás de su propuesta "hay una filosofía de la izquierda para evitar el coste social que tiene el envejecimiento".
Ha argumentado que, mientras una persona sana cuesta al Sistema Nacional de Salud menos de 300 euros anuales, una que necesite "procedimientos médicos intensos" supone entre 15.000 y 20.000 euros al año, a lo que se añaden la pensión y las ayudas por dependencia.
De este modo, ha concluido que "cada vez que desaparece una persona de estas características, desaparece un problema económico y financiero para el Estado".
Y, por eso, ha afirmado que la proposición de ley socialista "es un intento clarísimo de evitar costes al Estado de bienestar" por "las personas que son muy caras al final de su vida" y de acabar con los graves problemas de financiación del sistema.
"Para el PSOE, la eutanasia es una política de recortes en servicios necesarios para las personas que los necesitan", ha insistido Echániz, que ha recordado que los socialistas hace menos de dos años votaron en contra de la regulación de la eutanasia.
En su opinión, se demuestra que el PSOE se ha "radicalizado" y "podemizado" y, tras recalcar que no se trata de una demanda de la sociedad, ha defendido como alternativa a este "capricho" la ley de cuidados paliativos planteada por el PP.