El objetivo de la ONG ecologista es penalizar y desincentivar el uso del avión entre los ciudadanos.
Ecologistas en Acción propone que quienes más viajen sean los que más paguen. Se trata de desincentivar a los pasajeros con dos impuestos: una tasa a los viajeros frecuentes y otra por kilómetro recorrido, lo que encarecería los billetes progresivamente.
El portavoz de la ONG, Pablo Muñoz, asegura que el primer billete tendría un precio normal, pero después, cada billete adicional que se vaya comprando se iría gravando cada vez más: "De esta forma, volar sería mucho más caro".
También propone que se eliminen los vuelos de proximidad, es decir, los recorridos que en tren se pueden hacer en siete horas, que se amplíe la red ferroviaria y moratorias a los aeropuertos para que paralicen las ampliaciones.
Advierten también de que el sector de la aviación contribuye entre un 5% y un 8% al calentamiento global.
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