La elección del color del bañador puede ser crucial para la seguridad de los niños mientras nadan. Héctor Castiñeira, enfermero y divulgador de salud, señala que ciertos colores pueden hacer que los niños sean más fáciles de localizar tanto en el agua como en caso de emergencia.
Colores que mejoran la visibilidad
La respuesta visual al color del bañador varía según el entorno en el que los niños estén nadando. Sin embargo, se ha comprobado que los tonos rosas, amarillos, rojos y naranjas suelen ser los más visibles. Estos colores, especialmente cuando son fosforitos, destacan mejor en el agua, facilitando su localización.
Más allá de la elección del color del bañador, la vigilancia constante es esencial. El ahogamiento puede ocurrir en cuestión de segundos, por lo que nunca se debe dejar de vigilar a los más pequeños cuando están en el agua. La supervisión atenta y continua es la mejor medida de prevención para evitar tragedias.
Es necesario conocer los entornos y entender que la visibilidad del bañador puede variar según el lugar de baño, ya sea piscina, mar o lago, y ajustar la elección del color en consecuencia.
Por lo tanto, la combinación de una elección acertada del color del bañador y una vigilancia ininterrumpida puede hacer una diferencia crucial en la seguridad de los niños mientras disfrutan del agua.
