El cocodrilo del Nilo es una especie considerada peligrosa, pero también asustadiza, han informado este domingo fuentes de la Subdelegación del Gobierno.
Los expertos pretenden rastrear la zona con precaución para evitar que el animal se desplace fuera del área de unos cinco kilómetros en la que se considera que se mantendrá, si no es molestado, para facilitar su captura.
Para los trabajos de localización del reptil, que al parecer mide un metro y medio, en los que colaboran biólogos y para los se ha dispuesto el apoyo de un dron, se evalúa la posibilidad de que intervengan también el Grupo de Actividades Subacuáticas del Instituto Armado y los Bomberos.