Madrid | (Publicado 24.07.2019 13:10 )
La lucha contra el brote se ve dificultada por la acción de grupos armados como los que han matado a doce personas en las últimas horas al este del país, lo que demuestra la inseguridad presente en el epicentro de la epidemia.
La violencia está dificultando el control sanitario y tampoco ayuda la crisis de gobierno con la dimisión del ministro de Salud por desavenencias sobre el despliegue de la segunda vacuna contra el ébola -la primera se ha administrado ya a 170.000 personas-
Mientras tanto, la población extrema las medidas sanitarias, tal y como ha contado a Onda Cero, el sacerdote ecuatoriano, Roberto Laines, que lleva más de una década en la zona.
"Aquí no tenemos todos los recursos o medios para prever esta epidemia, que ha aumentado en los lugares públicos e incluso en nuestras parroquias. Hemos dispuesto cisternas de agua con jabón y cloro. En esta situación, es lo que podemos hacer", ha dicho.
Los países vecinos al Congo también han incrementado sus medidas de seguridad ante el riesgo de que el ébola pueda saltar la frontera.