Según ha informado hoy el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, de seguir este ritmo, a finales de 2016 se podrían haber alcanzado los 250.000 donantes de médula y lograría llegar a los 400.000 antes del plazo previsto en el Plan Nacional de Médula para 2020.
En declaraciones a Efe, el director de la ONT, Rafael Matesanz, ha subrayado el éxito de este plan, que desde 2011 ha multiplicado por seis la captación de donantes y "la cantidad de donantes que antes hacíamos en un año, ahora lo hacemos en dos meses".
"Esto pone de manifiesto que la cultura de la donación de médula se ha impregnado perfectamente en la sociedad española", ha destacado.
La ONT, en colaboración con las comunidades autónomas, acordó el año pasado continuar con el Plan Nacional de Médula Ósea una vez alcanzados sus objetivos (llegar a los 200.000 donantes) un año antes de lo planificado.
El acuerdo actual pretende duplicar de nuevo el número de donantes hasta llegar a los 400.000 en 2020, con un crecimiento anual de 40.000 donantes, lo que supone alrededor de 3.300 donantes al mes.
Los datos de la ONT y del Registro Español de Donantes de Médula Ósea (REDMO) registran 22.431 nuevos donantes en el primer semestre de este año, por encima de lo planificado para alcanzar los objetivos anuales (40.000).
Así, en lo que llevamos de año, el número de donantes ha pasado de 207.572 (a 1 de enero de 2016) a 230.003 (1 de julio de 2016), lo que supone un aumento de un 11% y hay 7 comunidades autónomas que igualan o superan este incremento: Aragón (22%), Galicia (20%), Asturias (18%), Castilla la Mancha (12%) y Cataluña (12%), así como la Ciudad Autónoma de Ceuta (17%).
En números absolutos, Andalucía, Cataluña, Madrid, Valencia, Murcia y Castilla y León son las comunidades con mayor crecimiento en los seis primeros meses de 2016.
En cuanto a los datos de trasplantes en 2015, los de progenitores hematopoyéticos (TPH) también aumentaron en España el pasado año, cuando se alcanzó un máximo histórico, con un total de 3.068 (65,8 personas por millón de habitantes).
El trasplante de progenitores hematopoyéticos incluye los trasplantes de médula ósea, de sangre de cordón umbilical y los de sangre periférica.
Este tipo de trasplantes aumentaron en todas sus formas, tanto los autológos -del propio enfermo- (1880), como los alogénicos realizados a partir de un familiar (732) y también crecen, aunque en menor medida, los alogénicos de un donante no familiar (456).
Sanidad ha destacado "el gran incremento" de los trasplantes haploidénticos (trasplantes familiares en los que el donante puede ser un familiar, pero que a diferencia de lo que venía sucediendo hasta hace poco, ya no exigen una compatibilidad absoluta entre donante y receptor).
Esta nueva modalidad de trasplante permite que prácticamente todos los pacientes que necesitan un donante lo acaben encontrando, bien en los registros de donantes no emparentados o bien en el ámbito familiar.
El trasplante haploidéntico constituye más de una tercera parte de todos los trasplantes alogénicos familiares, con un total de 248 realizados el pasado año.
Leucemia aguda, linfoma y mieloma múltiple son las principales enfermedades que pueden beneficiarse de un trasplante de médula.
En España, cada año cerca de 5.000 personas son diagnosticadas de leucemia aguda, alrededor de 7.000 de linfoma y cerca de 2.000 de mieloma múltiple.
Por otro lado, la leucemia es el cáncer infantil más frecuente y supone un 30% de las enfermedades hematooncológicas pediátricas.
El 70% de los pacientes que pueden beneficiarse de este tipo de trasplante, necesitan un donante no familiar.
En la actualidad, más de 28 millones de personas en todo el mundo son ya donantes de médula, cifra a la que se añaden los más de 650.000 cordones de Sangre de Cordón Umbilical (SCU) almacenados en el mundo.
España cuenta con el 10% de todas las reservas mundiales de SCU, con más de 60.000 cordones almacenados en bancos públicos y es el segundo país en el mundo, tras EEUU, con más unidades almacenadas.
Según los datos de la ONT, actualmente se encuentran donantes en el REDMO o en los registros internacionales para cerca del 90% de los pacientes, en un tiempo medio de 33 días, aunque el objetivo final es alcanzar la autosuficiencia completa.