Estar en contacto con el bañador o simplemente con ropa húmeda puede constituir un riesgo para la salud. La doctora en biología y profesora de la Universidad Internacional de La Rioja, María del Carmen Romero, insiste en la necesidad de lavar regularmente los bañadores y las toallas de baño.
En la superficie de la piel o en algunas mucosas existen microorganismos como bacterias y hongos que en determinados momentos pueden ocasionar enfermedades.
Además, cuando se da una proliferación excesiva por una humedad elevada puede provocar en mujeres la famosa infección llamada candidiasis vaginal.
La bióloga recomienda cambiarnos el bañador de forma regular y evitar en la medida de lo posible la humedad en la zona vaginal. Aunque si bien no es la causante de la infección si es un factor de riesgo que puede ser es el desencadenante de que aumente este hongo y generar candidiasis.
Cada cuánto tiempo hay que lavar las toallas y la ropa de baño
Los microorganismos pueden permanecer en la ropa durante meses por lo que es recomendable lavar la ropa de baño después de cada uso con un detergente neutro.
Las toallas de higiene diaria si las usa una sola persona, hay que cambiarlas cada tres o cuatro días y si es compartida cada dos o tres días. Por otro lado, las toallas de playa es recomendable lavarlas al final del día y tenderlas en un lugar aireado dónde les de el sol, explica la experta.
También se plantea el interrogante sobre si es necesario lavar la ropa cuando la adquirimos. Un estudio realizado por el microbiólogo Philip Tierno reveló que una serie de prendas analizadas contenían diversas bacterias. Por lo tanto, la bióloga María del Carmen Romero enfatiza en la importancia de lavar las prendas antes de estrenarlas ya que desde que estas se fabrican hasta que se venden son manipuladas por distintas personas.
