DESAPARICIÓN

Estas son las líneas de investigación sobre la desaparición de las niñas de Tenerife que cobran más fuerza

Anna y Olivia, de 1 y 6 años, desaparecieron el pasado 27 de abril. El padre de las niñas debía haber entregado a las pequeñas a su madre ese día, no obstante, no lo hizo e incluso la amenazó con que "no volvería verlas nunca más". Estas son las principales líneas de investigación del caso.

ondacero.es

Madrid | 20.05.2021 06:39

Estas son las líneas de investigación sobre la desaparición de las niñas de Tenerife que cobran más fuerza
Estas son las líneas de investigación sobre la desaparición de las niñas de Tenerife que cobran más fuerza | Agencia EFE

Anna y Olivia, de 1 y 6 años, desaparecieron el pasado 27 de abril con su padre Tomás Gimeno que no las devolvió a su madre a las nueve de la noche como estaba acordado entre ellos. Beatriz Zimmermann, la madre de las niña, pidió el pasado 14 de mayo como regalo, era el día de su cumpleaños, la difusión de las fotos y los vídeos de las menores e insistió en que no va a parar hasta encontrarlas porque asevera que de lo contrario su vida "no tendría sentido". Ya han pasado 22 días de la desaparición de las niñas.

Pistas inquietantes halladas en la casa del padre

La Guardia Civil ha registrado la vivienda de Tomás Gimeno sin encontrar pruebas concluyentes en las instalaciones hasta cinco veces. No obstante, sí encontraron dos cosas que llamaron su atención. La primera, fue un paquete de bolsas de tamaño de jardín. Eran nuevas y faltaban varias. Podrían coincidir con las que aparecían en el vídeo que demuestra que Tomásllegó en su coche a La Marina de Tenerife y que realizó hasta tres viajes a su barco trasladando bolsas y maletas. También la silla del coche de su hija pequeña que apareció junto a la embarcación, a la deriva.

El otro detalle inquietante que hallaron que el jardín del domicilio, como el propio domicilio que estaba muy desordenado y en mal estado, encontraba muchos desperfectos excepto por un área de tierra recientemente removida.

La policía podría utilizar un sonar

La Guardia Civil ha izado en tierra y se ha llevo en un remolque la embarcación de Gimeno para volver a analizarla con la ayuda de dos perros adiestrados para hallar restos orgánicos. En investigaciones previas, encontraron restos de sangre de Tomás Gimeno en la lancha. Con estos dos perros la Guardia Civil buscó nuevos indicios este martes por quinta vez la casa de Tomás sin que hallaran pruebas concluyentes más que las narradas anteriormente. El padre fue visto en el coche y el barco por última vez antes de que se le perdiera el rastro solo, sin la compañía de sus niñas.

Los investigadores están a la espera de que se les ceda un sonar y un robot submarino para incorporarlos a la búsqueda de las niñas desaparecidas, Anna y Olivia. Para ello, la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, ha confirmado este lunes que se ha contactado con el Instituto Español de Oceanografía (IEO).

Gimeno no soportaba que la madre de las niñas hubiera rehecho su vida

La primera hipótesis de la policía es que se trate de un crimen machista y que el padre haya asesinado a las niñas. Gimeno no aceptaba que su mujer hubiera decidido acabar con su relación, algo que hizo el pasado mes de agosto. Ni que la madre de sus hijas, hubiera iniciado una relación de pareja con Eric, un empresario belga afincado en Tenerife, de 60 años, para el que la mujer trabajaba.

Varios testigos relataron a la Guardia Civil que Tomás Gimeno mantuvo una fuerte discusión con su exmujer en el parking de un restaurante. Durante la discusión también estaba presente la nueva pareja de Beatriz, al que Gimeno amenazó e intento golpear.

La carta de Beatriz

Beatriz Zimmermann, tres semanas después de la desaparición de Anna y Olivia, de uno y tres años, junto a su padre, Tomás Gimeno, ha publicado una carta en sus redes sociales. En ella, Beatriz Zimmerman pide que no se cese en los esfuerzos por encontrar a sus hijas.

"Yo también quiero desaparecer, no tengo fuerzas. Esto es una tortura". Así empezaba la madre de las menores su alegato en esta carta, mostrando su agotamiento y desesperación tras la desaparición de sus hijas, asegurando que Anna y Olivia la necesitaban y ella también a las pequeñas. "Lo que más me duele es pensar que no puedo saber cómo están", ha lamentado en una desgarradora carta.