La Navidad de 2024 se perfila como una de las más costosas de los últimos años, en gran parte debido al aumento generalizado de los precios en productos básicos y específicos de las festividades. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), los hogares españoles tendrán que ajustar sus presupuestos para hacer frente a una cena navideña que no escapará de las subidas generalizadas de este 2024.
El IPC registró en noviembre un aumento interanual del 2,4%, impulsado principalmente por el encarecimiento de los carburantes y de la electricidad, que afecta indirectamente a toda la cadena de producción y distribución. Aunque los precios de los alimentos mostraron en noviembre un incremento más moderado, con una subida del 1,7%, esto no ha sido suficiente para aliviar la presión en los bolsillos de los consumidores. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ya advertía que la cena de este año sería, en promedio, un 5% más cara que en 2023.
Los productos navideños y su encarecimiento
El estudio de la plataforma eToro destaca que el coste de la cena típica navideña para una familia de cuatro miembros asciende a 67,07 euros, lo que supone un incremento del 2% respecto al año anterior. Este cálculo incluye platos tradicionales como el pavo relleno, que es uno de los protagonistas de la mesa. No obstante, el aumento de los precios no se limita únicamente a esta preparación. Productos icónicos como el cordero, uno de los preferidos en las mesas españolas durante estas fechas, han experimentado un encarecimiento significativo del 16% en comparación con el año pasado. Además, las ostras, un lujo habitual en estas celebraciones, son ahora un 19% más caras.
La carne de ave, que podría haberse consolidado como una alternativa más económica, ha mostrado estabilidad en sus precios este año, tras haber sufrido un fuerte incremento en 2023. Sin embargo, otros productos como el pescado fresco y el marisco han tenido comportamientos dispares. El precio del pescado apenas se moderó un 0,8%, mientras que el marisco experimentó un ligero descenso del 0,9%, aunque estos cambios no compensan los incrementos generales.
Aunque las bebidas espirituosas mostraron una ligera caída del 0,9% en noviembre respecto al mes anterior, su precio sigue siendo un 1,5% más alto que hace un año. Este patrón también se observa en otros productos que complementan la cena, como frutas frescas, destacando la granada, cuyo precio ha subido un 17%.
El encarecimiento generalizado no afecta por igual a todos los productos. Mientras que 10 de los 16 artículos clásicos de la cesta navideña son ahora más caros que el año pasado, algunos alimentos muestran variaciones moderadas o incluso ligeras bajadas. Aun así, los consumidores deberán priorizar y ajustar sus compras en un contexto marcado por la inflación acumulada y las proyecciones de costes energéticos elevados que inciden en toda la cadena de suministro.