La tecnología avanza de forma implacable y uno de los mayores ejemplos es el teléfono móvil. Hace unos años era impensable que en un solo dispositivo tengamos no sólo línea telefónica, sino un terminal que nos ofrece un mundo de posibilidades en cuanto a conectividad y contenidos multimedia. La Comisión Nacional de Mercados informa que ya hay más teléfonos móviles que personas en nuestro país.
Casi todos recordamos el primer teléfono móvil que tuvimos. Pero no todos lo conservan. En caso de que sí lo hagas, igual tienes un dispositivo que vale mucho más de lo que pensabas ya que coleccionistas están dispuestos a pagar grandes cantidades de dinero por ciertos móviles, tal y como informa el portal Update.
El primero que mencionan es el Motorola 8000X, de 1983. Uno de los primeros teléfonos móviles por el que ahora se paga hasta 4000 euros. Sentó las bases para los teléfonos móviles modernos y supuso el comienzo de una nueva era en las telecomunicaciones. Su peso es de 790 gramos con 33 centímetros de largo, 9 centímetros de ancho y 4 de grosor. Su pantalla era de una sola línea para mostrar el teléfono e información básica. Utilizaba una batería de níquel-cadmio recargable y su precio de salida en EEUU fue de casi 4.000 dólares. En estos momentos hay ofertas de compra por encima de los 4.000 euros.
Otro de los teléfonos con muy buen mercado es el Motorola Aura R1 de 2008. Un dispositivo exclusivo que se diseñó para clientes atraídos por el lujo y por la estética. Su precio era en su lanzamiento en EEUU de 2.000 dólares. Lo más llamativo era su pantalla circular protegida por un cristal de zafiro inspirada en los relojes de lujo. Si tienes este aparato puedes venderlo por más de 1.000 euros.
Si tienes un Nokia 8800, lanzado en 2005, también puedes venderlo por un buen pellizco ya que las ofertas están en torno a los 400 euros. Su principal característica era que ocultaba el teclado cuando no estaba en uso y su acabado de acero inoxidable.
También se ha revalorizado uno de los teléfonos más utilizados y míticos de esa época, el Nokia 3310 que salió al mercado en el 2000 y calificado como el móvil irrompible. Se convirtió en un icono dentro de los teléfonos móviles por su batería, duración y su mítico juego Snake. En la actualidad se puede vender por 400 euros.
Y si puedes sacar todavía más beneficio si tienes el primer iPhone del mercado de 2007, que se conoció como iPhone 2G y revolucionó por completo la industria de los teléfonos móviles marcando el inicio de la era de teléfonos inteligentes. Presentaba un diseño elegante y minimalista, con una pantalla táctil de 3.5 pulgadas en la parte frontal y una carcasa de aluminio en la parte posterior. Si lo conservas en buen estado te pueden hacer una gran oferta. Tanto es así que este mismo año se registró una venta de 40.000 euros de un iPhone de primera generación.