En este estudio se ha examinado el gasto total de energía diaria y su ingesta en individuos que mantienen la pérdida de peso en comparación con dos grupos, los que mantienen un peso normal y aquellos con sobrepeso u obesidad. Para ello, se ha utilizado el método de agua doblemente etiquetado, que permite determinar el gasto energético mediante muestras de orina recogidas una o dos semanas después de consumir este agua.
Por otro lado, también se ha medido la tasa metabólica de reposo de cada individuo para determinar qué cantidad de pérdida energética es de energía consumida en reposo y cuánto es de energía gastada durante la actividad física.
Los hallazgos de este estudio han revelado que aquellos que mantienen la pérdida de peso confían en el ejercicio para mantener el equilibrio energético en lugar de reducir la ingesta de alimentos.
"Nuestros hallazgos han demostrado que el grupo de los mantenedores de peso consumen un número de calorías por día similar al de individuos con peso normal y obesidad, sin embargo evitan recuperar peso compensando la ingesta con altos niveles de actividad física", ha destacado Victoria A. Catenacci, médico de control de peso e investigador en CU Anschutz Medical Campus (EE.UU).
Entre los datos claves obtenidos cabe destacar que del total de calorías quemadas cada día por los individuos que mantienen la pérdida de peso, la mayoría durante el ejercicio, fue mayor que en los individuos con controles normales de peso y aquellos que padecen sobrepeso u obesidad. En este contexto, han explicado que esto ocurre porque, a pesar del mayor coste de energía de mover una masa corporal mayor en el caso de individuos con sobrepeso, los que mantienen la pérdida de peso queman más energía durante la actividad física porque se mueven más.
Asimismo, el grupo que mantiene la pérdida de peso también obtuvo niveles más altos de pasos por día (12.000 pasos por día) en comparación con los participantes en un peso corporal normal (9.000 pasos por día) y los participantes con sobrepeso u obesidad (6.500 pasos por día).
Los resultados de este estudio han sido similares a los obtenidos en el estudio 'The Biggest Loser', en el se observaba que el gasto de energía en la actividad física estaba relacionado con la pérdida de peso.