El paracetamol es uno de los analgésicos más utilizados a nivel mundial y uno de los más recomendados y seguros para las madres gestantes. De hecho, más de la mitad de las mujeres embarazadas de los países desarrolladosrecurre en algún momento de la gestación al paracetamol. Sin embargo, ahora un estudio del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), gracias a las investigaciones recabadas en más de 70.000 niños europeos, concluye que la ingesta de paracetamol durante el embarazo está relacionada con trastornos por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y del espectro autista (TEA) en los menores.
Esta investigación, publicada este viernes en la revista 'European Journal of Epidemiology', ha analizado a 73.881 niños de diferentes países de Europa –Reino Unido, Dinamarca, Países Bajos, Italia, Grecia y España–, a los cuales se les había hecho un seguimiento antes de nacer y a lo largo de sus primeros años de vida.
Más probabilidades de desarrollar trastornos autistas y déficits de atención
Los resultados evidencian que aquellos niños expuestos al paracetamol en la fase prenatal tenían un 19% más de probabilidad de desarrollar síntomas de trastornos del espectro autista y un 21% más de desarrollar trastornos por déficit de atención que los menores no expuestos.
Limitar el consumo de paracetamol en embarazadas
Según explica Jordi Sunyer, investigador de ISGlobal, los resultados no implican que se deba prohibir este analgésico en mujeres embarazadas, sino que se debe usar siempre que sea necesario, aunque pide que se extremen las precauciones y se limite su consumo. "Teniendo en cuenta todas las evidencias sobre el uso del paracetamol y el desarrollo neurológico, estamos de acuerdo con las recomendaciones que indican que, si bien el paracetamol no debe suprimirse en mujeres embarazadas ni en la infancia, sí debe usarse solo cuando sea necesario", ha puntualizado.
Este estudio también analizó la exposición infantil posnatal al paracetamol, aunque los investigadores no observaron ningún tipo de relación entre el paracetamol tomado en la infancia y los síntomas de trastornos conductuales. Aún así, los científicos del ISGlobal recomiendan seguir investigando, dada la heterogeneidad de la exposición en los diversos grupos estudiados, que osciló entre el 6% y el 92,8%.
Otros estudios sobre el efecto del consumo prenatal del paracetamol
Algunos estudios ya habían empezado a relacionar la exposición prenatal al paracetamol con un deterioro del rendimiento cognitivo, problemas conductuales, TEA y síntomas de TDAH. Sin embargo, según ha explicado la investigadora Silvia Alemany, estos estudios son criticados por su heterogeneidad. "Ahora se ha hecho un esfuerzo por armonizar el modo en el que se han evaluado o definido los síntomas de TDAH y TEA, así como qué significa estar expuesto al paracetamol", detalla.
En 2019, una investigación publicada en la revista 'Paediatric & Perinatal Epidemiology' sugería que la toma de paracetamol durante el embarazo no era tan inocua como se consideraba. Estos investigadores ya apuntaban a que podría existir una relación entre la toma de este analgésico por parte de las madres gestantes y los problemas conductuales y de desarrollo en sus hijos.
Además, ese mismo año, el Ministerio de Sanidad español, a través de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), actualizó sus recomendaciones dirigidas a profesionales sobre el paracetamol durante el embarazo. Aunque no consideró que existiesen "evidencias de una asociación entre el uso prenatal de paracetamol y el impacto en el aparato urogenital o alteraciones del neurodesarrollo del niño expuesto intraútero", sí recomendaba "utilizarlo a la dosis mínima eficaz, durante el menor tiempo posible".
