El Consejo de Ministros ha aprobado hoy el anteproyecto de la nueva ley de convivencia universitaria que deroga el reglamento franquista de 1954 sobre disciplina académica y, consecuentemente, adecúa la norma al "marco constitucional", según ha explicado en una rueda de prensa la portavoz del Gobierno Isabel Rodríguez.
A falta de su posterior tramitación parlamentaria, esta nueva ley establece un régimen disciplinario que podrá castigar con expulsiones de hasta tres años a los alumnos que plagien, falseen documentos, destruyan patrimonio o hagan novatadas. No obstante, la portavoz ha subrayado que se trata de una norma que "busca sobre todo vías de mediación" en lugar de la sanción para resolver los conflictos.
Como novedad sobre el anterior borrador, el texto menciona la inclusión de las universidades privadas, de forma que el nuevo marco legal será de aplicación tanto para las universidades públicas como para las universidades privadas y sus respectivos centros adscritos. Así, todas ellas deberán implantar sus normativas de convivencia en función de los principios integrados en esta nueva ley que sitúa a la mediación como principal vía de resolución de conflictos.
Aplicación de la norma
La nueva ley del Gobierno, que cuenta con el aval de estudiantes y de rectores, entrará en vigor en enero de 2022 según las previsiones.
Sin embargo, solo se recurrirá al régimen disciplinario cuando las partes rechacen acudir a la mediación o sean incapaces de llegar a un acuerdo durante la misma y cuando la conducta sobre la que verse el expediente sancionador sea por acoso, violencia de género, fraude o destrucción de patrimonio.
La ley clasifica tanto las faltas como las sanciones en muy graves, graves y leves. Al primer grupo se adscriben las novatadas o conductas vejatorias, física o psicológicamente, que supongan un grave menoscabo para la dignidad de las personas, acosar o ejercer violencia grave contra cualquier miembro de la comunidad universitaria; acoso sexual; falsificar, sustraer o destruir documentos académicos y usar documentos falsos ante la universidad.
