"Habría que preguntar a los profesionales sanitarios por qué recetan ese medicamento para la obesidad, si sólo está indicado para la diabetes". La queja es de Juan Francisco Perán, presidente de la Federación Española de Diabetes (FEDE). Y el objeto de su queja son los nuevos fármacos inyectables, antagonistas del receptor GLP-1. Bajo ese epígrafe principios activos como la liraglutida, la semaglutida o la dulaglutida, y nombres comerciales como Ozempic, Saxenda, Victoza o Trulicity. Su efectividad en la reducción de peso han hecho que sean una demanda habitual a los endocrinos por parte de personas que no sufren diabetes pero sí obesidad o sobrepeso.
La consecuencia directa es que desde 2022 estos medicamentos faltan de las farmacias "y ese déficit de suministro se espera que se mantenga a lo largo de 2024", apunta el doctor Antonio Pérez, presidente de la Sociedad Española de Diabetes. Aunque existen alternativas terapéuticas para los pacientes, su ausencia de las boticas "está condicionando" la vida de las personas con diabetes, además de suponer "una sobrecarga para los profesionales sanitarios -apunta el doctor Pérez- ya que cuando el paciente va a la farmacia y no encuentra su medicamento, tiene que volver al médico".
Faltan insulinas e incluso agujas, denuncian los pacientes
A estos medicamentos se están sumando otros antidiabéticos. Hay desabastecimiento de algunas plumas de insulina de efecto rápido, determinadas formulaciones de metformina, glucagón inyectable e incluso, denuncian algunos pacientes a Onda Cero, "las agujas que necesitamos para inyectar las plumas".
El Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos hace seguimiento periódico del suministro de Medicamentos a través de su Centro de Información (CISMED); el 20% de los desabastecimientos corresponde al grupo terapéutico "tracto alimentario y metabolismo". Por detrás, los fármacos del sistema nervioso (16%) y los dermatológicos (14%).
Por marca comercial, ahora mismo, los medicamentos con más incidencias de abastecimiento, comunicados por las farmacias son:
- EFFERALGAN, para el tratamiento del dolor y la fiebre
- DIANE DIARIO, utilizado para el tratamiento de ciertas enfermedades de la piel en mujeres (recoge el mayor número de incidencias de suministro durante el mes de octubre)
- VOLTARÉN, anti-inflamatorio no esteroideo, utilizado para tratar el dolor y la inflamación
- OZEMPIC empleado en el tratamiento de la diabetes tipo 2
- NEOBRUFEN, tratamiento del dolor moderado o la artritis
El Ministerio de Sanidad, a través de la Agencia Española del Medicamento también tiene un control de los medicamentos con desabastecimiento, que en estos momentos recoge 923 formulaciones en problemas. Muchos de ellos (580) bajo la indicación "existe/n otro/s medicamento/s con el mismo principio activo y para la misma vía de administración". El resto figuran, entre otras razones, como en "desabastecimiento temporal" o "bajo una distribución controlada al existir unidades limitadas".
Dificultad para encontrar Dalsy, Primperan o Bisolvon
Entre los primeros, que no representan demasiado problema al existir una alternativa terapéutica, figuran fármacos tan conocidos como el Dalsy infantil o hasta 20 formulaciones de amoxicilina. También el antitusivo Bisolvon o el antiemético (frente a las nauseas) Primperan.
El Consejo General de Colegios de Farmacéuticos dispone de un canal, Farmahelp, que permite a las farmacias asociadas (alrededor de 10.000, casi la mitad de las existentes en España) consultar si alguna tiene stock de un medicamento con problemas y así poder derivar al paciente.
Según la Agencia Española del medicamento, están en desabastecimiento el 2,9% de los fármacos aprobados. Los problemas, asegura, "suelen deberse a problemas en la fabricación o distribución del medicamento". A ellas hay que sumar el retraso en la llegada de los principios activos, la mayoría de los cuales no se producen en Europa sino en China o India.