Tras esta citación judicial, a la que han asistido el padre, la madre, una hermana y un hermano de Rivas, quien el pasado lunes entregó ante la Guardia Civil a sus niños al padre, el italiano Francesco Arcuri, la Fiscalía no prevé pedir ningún tipo de medidas cautelares, ha informado a Efe un portavoz del Ministerio Público.
El letrado del despacho que presenta, junto al abogado José Estanislao López, en esta causa penal a Rivas y a sus familiares ha reconocido, en declaraciones a los medios de comunicación, que "la situación es muy complicada".
Ramírez ha dicho que las cuatro personas que habían sido citadas como investigadas a partir de las 10:00 horas de esta mañana, los padres y los hermanos de Rivas, han comparecido ante la juez, pero no han respondido a ninguna pregunta acogiéndose a su derecho a no declarar.
Preguntado sobre los próximos pasos judiciales que podría tener el caso, el paradero actual de los menores con Francesco Arcuri o si hay conversaciones con esa parte paterna para llegar a algún tipo de acuerdo, ha señalado que no podía responder o que desconocía tal información.
Únicamente ha señalado que el equipo jurídico del que forma parte contactará con abogados de Italia para abordar la citación judicial prevista en ese país el próximo 31 de octubre y sobre la que tampoco ha ofrecido más detalles.
"Disculpad que no podamos hacer manifestaciones. Queremos que entendáis la situación y el trabajo tan delicado que nos toca y la importancia de este caso", ha sentenciado el letrado en respuesta a los periodistas.
Los familiares de Juana Rivas accedieron esta mañana, minutos antes de la 10.00 horas, al edificio de La Caleta donde se ubica el Juzgado de Instrucción 2 de Granada para declarar como investigados y no han querido hacer declaraciones ante los medios de comunicación ni a su llegada, ni a la salida.
Su citación judicial se ha producido un día después de que lo hicieran ayer la asesora jurídica del Centro Municipal de Información a la Mujer de Maracena, Francisca Granados, y la psicóloga de este servicio, Maite Sanz, por los mismos motivos.
Ambas funcionarias se acogieron a su derecho a no declarar amparándose en el secreto profesional, pero negaron luego en su comparecencia posterior antes los periodistas haber cooperado en la sustracción de los menores.
Precisamente ayer el Juzgado de Violencia Sobre la Mujer 2 de Granada no admitió las medidas de protección para los hijos de Rivas que había pedido el Centro de Información a la Mujer de Maracena al haberlas formalizado su asesora, Francisca Granados, que no ejerce de abogada de la madre de los dos niños.
A la espera de nuevas diligencias judiciales que pueda ordenar a partir de ahora la titular del Juzgado de Instrucción 2 de Granada, Juana Rivas mantiene su condición como investigada por los delitos de sustracción de menores y desobediencia a la justicia.
Rivas acató finalmente el pasado lunes la orden judicial que la obligaba a entregar a sus hijos al italiano Francesco Arcuri, quien recogió ese día en la Comandancia de la Guardia Civil de Granada a los dos niños, de once y tres años y que, según su abogado, están bien y tranquilos.