Noruega, Reino Unido e Irlanda son los principales destinos para las enfermeras españolas que deciden trabajar fuera de España. Las condiciones laborales y los sueldos que llegan a alcanzar los 4.500 euros mensuales son los principales motivos de la fuga de talento. En España no se están haciendo las cosas bien, desde el Consejo General de Enfermería insisten en que no somo un país atractivo para trabajar.
Motivos para emigrar
Según Diego Ayuso, secretario del Consejo General de Enfermería los motivos son multi factoriales, "las condiciones de trabajo no son atractivas con contratos precarios algunos incluso por días". Los profesionales de enfermería se enfrentan además a sueldos muy bajos tras cuatro años de formación universitaria, "el tema salarial es otro motivo por el que se marchan, son salarios muy bajos y en Europa tienen ofertas de hasta4500 euros mensuales. No somos competitivos para retener este talento.
Ratio por pacientes
Otra de las circunstancia por la que se marchan las enfermeras es la sobrecarga de trabajo, una ratio muy alejada de la media europea. En España en atención hospitalaria una enfermera tiene a su cargo 15 pacientes, en Europa 8. El estrés que conlleva y la falta de seguridad es otro motivo más para irse.
Coste de formación
Formar una enfermera en España tiene un alto coste, si en una universidad privada la media es de 50.000 euros, en la universidad pública la plaza se paga con los impuestos de todos. Se invierte en formación pero no revierte. En España hacen falta enfermeras, incluso si no se fueran al extranjero seguirían siendo profesionales deficitarios.
Desde el Consejo General de Enfermería piden un grupo de trabajo en el que esté presente el Ministerio y las comunidades autónomas para abordar este problema con una buena política de recursos humanos, ofertas atractivas y una planificación a largo plazo que evite la fuga creciente de enfermeras.
