Greenpeace achaca gran parte del problema a las grandes empresas que no cumplen con la obligación legal de recuperar y reciclar el 100% de sus envases vendidos, lo que supone un sobrecoste al ciudadano. Además, denuncia que la bolsa de basura contiene el 10% de envases plásticos de usar y tirar.
Hay que cambiar radicalmente nuestro consumo, según Julio Barea, responsable de la campaña de plásticos de la organización "hay que reducir sustancialmente el consumo que hacemos de elementos de usar y tirar".
Denuncia también que solo el 25% de los envases plásticos se recuperaron en nuestro país en 2016 y que cada día millones de microplásticos entran a formar parte de nuestra cadena de alimentación.