El accidente del helicóptero Pegasus de la Dirección General de Tráfico (DGT) en la localidad madrileña Robledo de Chavela sigue dejando sorprendentes detalles. Si hace unos días conocíamos que el piloto, un funcionario de Tráfico de 60 años, dio positivo en el test de drogas, ahora fuentes de la investigación confirman que no solo había dos personas en la aeronave, sino que eran tres.
El vuelo estaba programado y autorizado solo para dos personas. El piloto y el operador de cámara. Según informa La Sexta, había un tercer ocupante. Se trata de la mujer del operario de cámara, tal y como ha confirmado él mismo. Tanto el piloto como el operario están apartados temporalmente del trabajo por mala praxis.
El piloto dio positivo en cocaína y metanfetaminas. Tras el accidente, trató de hacer auto-stop para llegar a casa de un familiar cercana al lugar del accidente. El operador de la cámara, resultó herido de carácter leve por lo que fue trasladado al hospital Puerta de Hierro de Madrid.
La DGT cuenta con 13 helicópteros Pegasus, repartidos por sus bases de toda España. Además, en la actualidad disponen de 23 pilotos habilitados para su tripulación. Los controles sobre este tipo de vuelos recaen en la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), dependiente del Ministerio de Transportes. La aeronave es un Eurocopter AS355 N Ecureuil 2, un helicóptero valorado en unos tres millones de euros y que en España operan las policías autonómicas, Tráfico y los agentes forestales.
Se trata de una nave ligera de fabricación francesa que realizó sus primeros vuelos a finales de los años setenta. Tiene un peso algo superior a una tonelada, una longitud de casi 13 metros y una altura de poco más de tres metros y tiene capacidad para unas siete personas. El precio por unidad ronda entre los 2,7 y los 3,4 millones de euros.
