Este domingo ha comenzado la huelga entre los tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) de Iberia Express convocados por USO que durará 10 días. Los trabajadores de la compañía aérea demandan mejoras salariales en la negociación del convenio, de la que se ha desmarcado CC.OO., la otra central con representación en la compañía.
La compañía ha explicado que operará el 93,2 % de los vuelos programados entre este domingo y el próximo 31 de agosto, periodo en el que ha cancelado 28 vuelos no incluidos en los servicios mínimos decretados por el Ministerio de Transportes.
Después de un intento fallido de acercar posturas este pasado viernes en la mesa negociadora del II Convenio de TCP de Iberia Express, USO mantiene la convocatoria de huelga hasta el próximo 6 de septiembre para los 532 tripulantes de la aerolínea.
Los servicios mínimos fijados por el Ministerio de Transportes se sitúan entre el 32 % y el 85 % de los servicios operados a o desde Madrid por Iberia Express, la filial de bajo coste de Iberia.
El sindicato convocante cifra en 92 los enlaces con base en Madrid-Barajas que se suspenderán en los 10 días para los que están convocados los paros, pero fuentes de la aerolínea precisan que las suspensiones a partir del día 31 no se han decidido todavía.
Vuelos cancelados
Los únicos vuelos cancelados por la compañía son los que salen desde Madrid-Barajas con destino a:
- Canarias: 1 vuelo (ida/vuelta) los días 28, 29 y 31 de agosto.
- Baleares: 1 vuelo diario (ida/vuelta) los días 28, 29, 30, 31 de agosto.
- Sevilla: 1 vuelo diario (ida/vuelta) los días 28, 29, 30 de agosto.
- Santiago: 1 vuelo diario (ida/vuelta) los días 28, 29, 30 de agosto.
- Málaga: 1 vuelo (ida/vuelta) el 29 agosto.
De los 3.700 clientes que la aerolínea calcula que se verán afectados por estas cancelaciones, 3.000 ya han sido reubicados en otros vuelos y el resto está pendiente de elegir la opción que más les convenga (transporte alternativo, reembolso, cambio de fecha o bonos).
USO exige adecuar los salarios a la subida del coste de la vida, ya que llevan congelados desde 2015, según sus datos, en tanto que la empresa defiende que las exigencias sindicales son "desproporcionadas" y supondrían un aumento del coste salarial por encima del 26 %.
CCOO se desmarcó de esta convocatoria y firmó un acuerdo con la compañía mientras se negocia el convenio por el que Iberia Express abonaría a todos los tripulantes un anticipo a cuenta del convenio de 1.350 euros para los sobrecargos y de 950 euros para los TCP.