Los investigadores Katalin Karikó y Drew Weissman han sido distinguidos con el Premio Nobel de Medicina o Fisiología 2023 por sus descubrimientos sobre modificaciones de bases de nucleósidos que permitieron el desarrollo de vacunas de ARNm eficaces contra la COVID-19, según ha anunciado este lunes el Instituto Karolinska de Suecia.
Los descubrimientos de Karikó -húngaroestadounidense- y Weissman -estadounidense- "fueron fundamentales para desarrollar vacunas de ARNm eficaces contra la covid-19 durante la pandemia que comenzó a principios de 2020", explicó la entidad sueca al anunciar el galardón.
Sus hallazgos abrieron la vía a esas vacunas, que "han salvado millones de vidas y han prevenido enfermedades graves en muchas más".
El Nobel les ha sido concedido por "sus descubrimientos sobre las modificaciones de las bases de nucleósidos que permitieron el desarrollo de vacunas eficaces de ARNm contra el COVID-19", según el fallo del jurado.
Los galardonados descubrieron que el ARNm con base modificada se puede utilizar para bloquear la activación de reacciones inflamatorias y aumentar la producción de proteínas cuando el ARNm se administra a las células.
Ambos publicaron sus resultados "en un artículo fundamental de 2005 que recibió poca atención en ese momento, pero sentó las bases para desarrollos de importancia crítica que han servido a la humanidad durante la pandemia de COVID-19".
El Nobel de Medicina es el primero de la ronda de estos prestigiosos premios, a los que seguirán los anuncios en días sucesivos de los de Física, Química, Literatura, de la Paz y finalmente el de Economía, el próximo lunes.
Una trayectoria ya reconocida con el Princesa de Asturias
La trayectoria de Katalin Karikó y Drew Weissman fue reconocida, junto a Philip Felgner, Uğur Şahin, Özlem Türeci,Derrick Rossi y Sarah Gilbert, con el Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica el 23 de junio de 2021.
El jurado del Premio Princesa de Asturias acordó concederles el galardón porque: "Los premiados son protagonistas de uno de los acontecimientos más destacados de la historia de la ciencia. Sus trabajos constituyen un excelente ejemplo de la importancia de la ciencia básica para la protección de la salud a escala global".
"Con sus largas trayectorias en investigación básica, han conducido a innovadoras aplicaciones como la obtención, en un tiempo extraordinariamente corto, de vacunas efectivas para luchar contra la pandemia de la COVID-19. Tanto el desarrollo de la tecnología novedosa del ARN mensajero, como la producción de vacunas basadas en adenovirus abren un camino de esperanza para su uso frente a otras enfermedades", señala el acta.