La madre del conductor del autobús escolar que volcó en una rotonda de Fuenlabrada asegura que el narcotest que indicaba un cosnsumo de cocaína es un falso positivo. Admite que su hijo consumiera cocaína el viernes pasado en una fiesta. "Como cualquiera", apunta. Sin embargo, desmiente que lo hubiera hecho seis horas antes de coger el autobús como establecería el positivo del narcotest.
Su hijo se encuentra a la espera de que se le realice un segundo test que determine la exactitud del primero, hecho a pie de carretera. Sobre las acusaciones vertidas por algunos niños sobre el conductor en las que le reprochan mala actitud y conducción asegura que su hijo "llevaba muchos años conduciendo autobuses y le encantan los niños". "Él también es padre, y con estas acusaciones le están arruinando la vida", denuncia.
La explicación que le dio su hijo sobre el siniestro es que al coger la rotonda se le bloqueó el volante, intentó enderezarlo pero se le volcó el autobús. Reconoce que su hijo es muy nervioso "pero no es un asesino", apunta.