El hombre prestó declaración anoche ante la Policía Nacional de Manacor en calidad de investigado por homicidio imprudente, después de ser atendido en el Hospital de Manacor por una crisis de ansiedad.
Fue dejado en libertad, a la espera de lo que decida el juzgado de guardia. La Policía Nacional ha abierto una investigación para esclarecer los hechos. Según la primera versión ofrecida por el hombre, aparcó el coche en la calle S'Hort des Cabré de Manacor sobre las siete de la mañana y se fue a tomar un café mientras la bebé dormía en el automóvil. Como no es habitual que le dejaran a la bebé, se le olvidó que estaba en el coche.
Cuando regresó y vio la crítica situación de la pequeña pidió ayuda de inmediato. La bebé fue atendida en primera instancia por un médico que pasaba por la calle y por dos empleadas de una clínica cercana, que no pudieron reanimarla. Falleció debido a la elevada temperatura del interior del coche.
El abuelo y la pequeña son de nacionalidad española. El cadáver de la bebé fue trasladado al Instituto Anatómico Forense de Palma, donde se le practicará hoy la autopsia.