El juicio contra Daniel Sancho concluyó el pasado 2 de mayo en Koh Samui (Tailandia) tras un proceso que ha durado cerca de un mes. Dos semanas después, su defensa ha denunciado haber sido víctima de una estafa después de que un hombre asegurara contar con un testigo protegido importante para la causa seguida en Tailandia.
Un vídeo clave para la defensa de Sancho
Según un comunicado publicado por el despacho de abogados Balfagón-Chippirrás, que colabora con la defensa de Sancho, liderada por el abogado Marcos García Montes, un ciudadano colombiano llamado Alberth Araque Trejo se habría puesto en contacto con el acusado a través de Instagram ofreciéndole un vídeo de Arrieta en "actitud agresiva hacia un menor".
Además, Araque le aseguró que existía una denuncia presentada en 2017 contra el cirujano por "la comisión del delito de acto sexual abusivo y violento" contra un menor en Colombia.
"Estimando que la citada denuncia podría ser de interés para la causa seguida en Tailandia contra Daniel Sancho, esta representación solicitó que se acreditara dicha información de manera fehaciente", ha concretado el despacho de abogados, a quien Araque puso en contacto con una tercera persona que también habría presentado una denuncia contra Arrieta en 2021, en este caso en Venezuela.
Este hombre se comprometió a acudir a Tailandia como testigo protegido para testificar en el juicio, pero finalmente dicha comparecencia no tuvo lugar, pese a que el equipo legal de Sancho financió "todos los gastos", según el despacho.
El supuesto testigo exigía más dinero
La defensa del joven español también transfirió a esta persona un total de 800 euros para costear la "remisión de documentación" relativa a las denuncias ante un funcionario público o la autoridad competente para legalizar las mismas, con el fin de ser aportadas como pruebas en el juicio.
"En ese importe estaban recogidos los gastos previsibles de legalización de la denuncia, más los gastos de desplazamiento desde la localidad de Santiago de Tolú, lugar de trabajo del entonces menor, a Cali, donde residía la madre, depositaria de la denuncia, así como la vuelta", ha concretado el despacho.
No obstante, el pasado diciembre, pocos días después del pago, Araque comunicó a la defensa de Sancho que la madre del menor no deseaba entregar la denuncia, ante lo que el despacho solicitó la devolución del dinero no empleado.
Sin embargo, Araque exigió más dinero a Sancho bajo la amenaza de poner toda esta información en conocimiento de medios de comunicación.
El despacho ha defendido que con los pagos solo pretendía conseguir "la viabilidad de estas pruebas dentro del derecho de defensa" y ha anunciado que se reserva su derecho a emprender "acciones legales" contra Araque por los delitos de "apropiación indebida, estada y extorsión".