Pues es que resulta que lareina Isabel II prohibió expresamente a todas las mujeres de la familia real usar esmalte de uñas de colores. De manera que consideran que la duquesa ha desafiado el protocolo de la familia real británica.
Además, se ha hablado de Meghan Markle también por la supuesta mala relación que tendría con algunos de los asistentes de la Casa Real. Y es que esta semana hemos conocido que una segunda asistente, que lleva 17 años trabajando para la casa real, ha anunciado que dejará su puesto cuando nazca el bebé. La salida de esta nueva asistente no ha hecho más que incrementar los rumores sobre el mal carácter de la duquesa.
No es la única polémica en la que se ha visto envuelta Meghan Markle, porque también se habla mucho de su presunta mala relación con su cuñada con Kate Middelton, duquesa de Cambridge. Ese podría ser uno de los motivos que habría llevado a los duques de Sussex ha abandonar Kensington Palace, donde también viven, el príncipe William y su esposa, y trasladarse a una casa ubicada en los terrenos del castillo de Windsor.