La hermana Patricia de las Carmelitas Descalzas de Hondarribia (Gipuzkoa) ha aludido a la sentencia que condena por abuso sexual a los cinco integrantes de la denominada 'Manada', que el 7 de julio de 2016, durante las fiestas de San Fermín, abusaron de una joven de 18 años en Pamplona, para señalar que "no se puede aceptar que se cometa una atrocidad de éstas y la que sea juzgada, condenada y humillada públicamente sea la víctima".
En una entrevista radiofónica, la hermana Patricia ha sido preguntada por el comentario que publicó este pasado jueves en Facebook.
Sobre la razón que le llevó a escribir este comentario, la religiosa ha indicado que es uno de los medios que tienen a su alcance para expresar su solidaridad con "esa mujer en concreto y con todas las mujeres que tienen que pensárselo dos veces antes de cruzar una calle oscura, antes de ir solas a casa, que tienen que hacer planes para saber con quién vuelven, cuándo vuelven, cómo vuelven y que encima tienen que sentirse juzgadas y amenazadas por ello".
"Hay muchas cosas que nosotras tampoco sabemos, pero sí que pensábamos que desde nuestra posición, es una posición de alguna manera transversal, es importante decir: esto no es una reivindicación de unas pocas, es una reivindicación de toda la sociedad, y nosotras que estamos aquí en clausura y que no salimos por la noche, también nos sentimos amenazadas y también nos sentimos implicadas en todo esto y en todo lo que atañe en el fondo a una injusticia", ha señalado.
En este sentido, ha dicho no entender "que esto (en referencia a la sentencia) se califique como se ha calificado y no como una agresión, que es lo que cualquiera de nosotras sentimos simplemente con escucharlo".
Asimismo, ha asegurado que también las monjas "forman parte de esto, en primer lugar por ser mujeres, y por todas las mujeres que nos rodean y nos importan, y simplemente por ser personas". "Esto no es una guerra entre hombres y mujeres. Esto es algo que no se puede admitir, no se puede aceptar que se cometa una atrocidad de éstas y la que sea jugada, condenada y humillada públicamente sea la víctima", ha concluido.