Y entre los mensajes había uno que hablaba de tecnología y futuro. Nos recordaba que somos el país mejor conectado de Europa con la fibra óptica. Y por cierto, además somos además el tercero de la OCDE tras Japón y Corea del sur.
Un dato crucial para nuestro futuro.Nuestra red de fibra hasta el hogar no solo es la más grande, sino podemos incluso decir que España tiene más hogares pasados de fibra que la suma de hogares de Francia, Italia, Alemania y Reino Unido. Ojo que estamos hablando de las cuatro primeras potencias europeas.
Y esto ha ocurrido en apenas diez años. Éramos de los últimos en ADSL, en el viejo cobre. Pero administraciones y operadoras de telecomunicaciones supieron apostar por el futuro y conseguir acuerdos e inversiones que nos han llevado ahora a esta posición tan ventajosa.
Porque la fibra es el nuevo sistema circulatorio de la economía digital de hogares y empresas. La fibra óptica es el mejor medio de transmisión para la transmisión de datos. En realidad es un hilo muy fino de material transparente, vidrio o materiales plásticos, por el que se envían pulsos de luz que representan los datos a transmitir. Sin fibra óptica ni Internet ni las comunicaciones actuales serían posibles. Ni muchos otros campos donde también es fundamental.
Y eso se debe al físico indio Narinder Singh Kapany, que en 1953 fue el primero en diseñar y fabricar un cable de vidrio capaz de transportar la luz. Uno de esos nombres que el propio éxito de su invento olvida y sepulta. Con él empezó todo. Y por eso muchos le llaman, porque todavía con 92 años vive, “el hombre que consiguió doblar la luz”.
Sirva su ejemplo para pedir a todos nuevas apuestas y acuerdos por la ciencia y tecnología, para que España pueda también doblar el futuro.