Sanidad publicaba este pasado 19 de mayo en el BOE una orden que, para la mayoría de aquellos que tienen que elegir una plaza de formación sanitaria especializada en 2021, establece algo intolerable. Los MIR (Médicos Interinos Residentes), EIR (Enfermeros), FIR (farmacéuticos) o PIR (psicólogos), entre otras especialidades sanitarias, tendrán que elegir su plaza de forma telemática.
Los recién graduados deberán elaborar una lista cerrada de hasta 8.000 posibles elecciones de especialidad. Después, Sanidad publicará un documento con la relación de las plazas adjudicadas. La principal diferencia con respecto al sistema presencial, es que antes los futuros sanitarios elegían de manera ordenada (según los resultados en su examen de acceso), podían ver en directo las plazas pendientes de adjudicación y elegir en función a los huecos disponibles.
Este sistema perjudica especialmente a aquellos que han obtenido peores resultados en el examen de acceso y están entre los últimos para elegir en la lista de los 8.000 que aprueban el examen.
Un método de elección enrevesado
Además, la mayoría de MIRes considera inasequible hacer una lista tan larga en tan poco tiempo y además desconocer cuál de tus miles de opciones puede ser seleccionada hasta que ya se te ha adjudicado. Denuncian que este sistema provocará renuncias y plazas de profesionales sanitarios desiertas que no podrán recuperarse hasta 2022.
Pese a las críticas del colectivo, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha asegurado que “el proceso establece todas las garantías de equidad y seguridad que el anterior, pero con mejoras en la eficacia y eficiencia”. La ministra, además, asegura que ha cubierto una de las demandas del colectivo, que era la posibilidad de “pasar de turno” de manera online para aquellos que han sacado mejor nota que su pareja o compañero y prefieren pasar su turno para después elegir una plaza de especialidad en la misma localidad. No poder hacer lo contrario, defienden los sanitarios, va en contra de cualquier buena práctica de conciliación familiar. No obstante, el principal reclamo, es decir, que la elección sea en tiempo real y no en diferido, permanece ignorado por el ministerio.
También se ha pronunciado al respecto de este sistema el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), que ha rechazado este martes la suspensión cautelar de este proceso de adjudicación telemática de plazas, como había reclamado la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM).
En 2020 la elección finalmente fue mixta
En 2020, en pleno clamor de la pandemia, Sanidad pretendió que el sistema fuera también enteramente telemático, pero el Tribunal Supremo en esta ocasión se posicionó a favor de los colectivos sanitarios y permitió un modelo de elección mixto. Los aspirantes podían elegir por turnos de 400.
En todo caso, este año la suerte podría estar echada para los futuros sanitarios. Darias sentencia que hay que cumplir “el marco jurídico” que establece que el proceso debe ser telemático, y añade que miles de personas ya han presentado sus “solicitudes no firmadas" para elegir online su plaza de especialización.
El peligro del "colapso sanitario"
Este sistema telemático retira la posibilidad de que queden plazas vacantes que puedan ser ocupadas por los siguientes de la fila. En Ondacero.es hablamos con algunos MIRes que nos confirman que ahora se deben elegir el mismo número de opciones como número de la 'lista' estés: "Si eres el 5.000, tendrás que seleccionar 5.000 especialidades". Sin embargo, el problema es que la lista inicial no se actualiza en función de las que ya han sido escogidas, por lo que "actúan a ciegas".
¿Y por qué no quedan vacantes? Cuando se han ocupado todas las especialidades, es frecuente que cerca de 2.000 personas renuncien porque no están satisfechos y prefieran repetir el examen. Mediante este sistema, dichas plazas no vuelven a estar disponibles, sino que figuran como elegidas aunque no sea así. "Se nos dice que no cojamos por coger, pero al no saber que queda disponible, optas por seleccionar algunas por miedo a quedarte sin", comentan.
Las 2.000 plazas libres se traducen en 2.000 sanitarios menos durante 5 años, ya que es este el tiempo que dura la interinidad, dando como consecuencia el "colapso del sistema de salud" por falta de trabajadores.
No solo esto, sino que los MIR también manifiestan que la web para elegir especialidad no funciona correctamente y son frecuentes las caídas del sistema: "Muchos compañeros después de seleccionar la primera y guardar no pueden seguir escogiendo y otros ven como por mucho que prioricen las plazas, no se colocan en el orden deseado", recuerdan.