Muere envenenada una empleada doméstica filipina en Arabia Saudí

Emerita Gannaban, de 44 años, murió el 29 de octubre en el hospital Príncipe Mohammed Bin Abdulaziz en Riad, donde trabajaba desde junio, indicó en un comunicado el Departamento de Asuntos Exteriores filipino. "El Gobierno le asegura a la familia de Gannaban que investigará de cerca las circunstancias de su muerte, así como las denuncias de que había sido maltratada", dijo Exteriores que añadió que la repatriación del cadáver se hará después de la autopsia.

El caso es el último de una serie de abusos que padecen los trabajadores filipinos en Oriente Medio, el principal destino de los 3.000 que salen cada día de su país con un contrato temporal, la mayoría como empleadas del hogar o en la construcción. En febrero, Filipinas prohibió el envió de trabajadores a Kuwait después de que se encontrara el cuerpo de una filipina en un congelador de la casa de sus empleadores, lo que provocó un conflicto diplomático que se resolvió un mes más tarde con el levantamiento de la prohibición.

La semana pasada, una filipina fue repatriada tras pasar cuatro años en prisión en Abu Dhabi y después de que se le anulara la condena a muerte por haber matado a su empleador cuando este intentaba violarla a punta de cuchillo. Unos 10 millones de filipinos son trabajadores emigrantes en el exterior y el envío de sus remesas supuso el 10,46 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) filipino en 2017, según el Banco Mundial.