Un bebé de tres meses ha fallecido de un golpe de calor después de que sus padres se le olvidasen durante horas en el asiento de atrás de un coche, que permaneció aparcado frente a un garaje bajo el sol.
Los servicios de emergencia recibieron una llamada alertando de la presencia del bebé en el coche -que presentaba signos de sofocación-. Al llegar, comprobaron que era un bebé de unos tres meses de edad que se encontraba en el asiento de atrás del coche y al parecer, llevaba horas ahí.
Sus padres se habían olvidado de él después de aparcar el vehículo en la puerta de su vivienda en Pittsburghel, Pennsylvania (Estados Unidos), bajo el sol en plena ola de calor.
Al llegar, los efectivos sanitarios intentaron reanimar al pequeño sin éxito pudiendo únicamente certificar su muerte. Según las primeras investigaciones, el pequeño pudo perder la vida tan sólo unos minutos después de quedarse solo en el coche debido a las altas temperaturas.