Uno de los planes más habituales en verano es ir a la playa. No obstante, puede resultar algo peligroso si no se siguen las indicaciones de los socorristas. El mar, que está en constante movimiento, puede experimentar fuertes corrientes capaces de arrastrar a los bañistas hasta lo más profundo del océano, impidiendo que puedan volver a la costa. Además, se pueden producir mareas y violentas olas que pueden poner en riesgo la seguridad de los presentes.
Al llegar a la playa, lo primero que se recomienda es comprobar de qué color es la bandera alzada en la torre de salvamento, ya que es la señalización que advierte sobre el estado del agua. En caso de que sea roja, queda totalmente prohibido el baño por las peligrosas circunstancias en las que se encuentra el agua. Pero, ¿Qué ocurre si se incumple la normativa?
Multas económicas por bañarte cuando está prohibido
Bañarse en la playa con la bandera roja implica estar jugándose la vida, por lo que la consecuencia de este acto es una multa económica que varía en función de cada ordenanza municipal.
Por ejemplo, en la Comunidad Valenciana, la playa de Sagunto considera esta acción como leve, imponiendo sanciones de 150 euros. Por lo contrario, en la Malva-rosa o Pinedo, la multa oscila entre los 751 y los 1.500 euros, al igual que ocurre en Barcelona.
Es importante atenerse a las normas de estos espacios públicos para evitar sanciones, aunque antes de ser multado, serán los socorristas los que solicitarán la salida del agua. En caso de no obedecer el aviso, darán parte a la policía local o a la Guardia Civil.
Otras prohibiciones en la playa que conllevan multas
Estas son algunas cosas que no puedes hacer en la playa, según la Ley de Costas:
- Acampar
- Ducharse con jabón
- Fumar
- Hacer nudismo
- Pescar sin autorización
- Reservarse hueco en la arena
