La Consejería ha tomado esta decisión por "prudencia" y sin "prejuzgar" hasta que esté listo en los próximos días el informe del Servicio de Inspección, que actuó de "oficio" para aclarar lo sucedido. En este sentido, López ha confirmado que, si se confirma alguna negligencia, afectaría "sin duda" al concierto con la clínica.
El paciente fue citado para una cirugía mayor ambulatoria en la clínica el pasado 9 de febrero y, durante la intervención, su situación se "deterioró" y el personal facultativo estimó necesario su traslado al Hospital Reina Sofía de Murcia, donde falleció finalmente el pasado 21 de febrero.
López ha aclarado que la clínica, que atiende pacientes del Área 1 de Salud (correspondiente al Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca) y del Área de Salud 7, realizó en 2017 un total de 4.000 intervenciones de pacientes derivados desde el Servicio Murciano de Salud (SMS), el 96 por ciento de los cuales fueron atendidos con recursos propios del SMS y el 2 o 3 por ciento restante con medios propios del hospital.
En el caso del fallecido, la intervención se realizó con medios propios del SMS (los cirujanos, mientras que el resto del equipo y de la estructura fue facilitada por la clínica), según López, quien ha señalado que a consecuencia de este suceso han estado revisando el historial de la clínica y han detectado un antecedente hace más o menos hace dos años del que no se conocen los detalles y que no tuvo consecuencia de "muerte" pero sí "efectos adversos".