La madre ha sido condenada por el tribunal de Angulema (Francia) a 18 meses de prisión por abandonar a su hijo de 9 años, que tuvo que sobrevivir sólo durante dos años en un apartamento de Charente.
"¡Qué tristeza!", ha dicho la fiscal Anne Medioni, declaraciones que reflejan el sentimiento que deja la noticia publicada por el medio francés Charente Libre.
El pequeño sobrevivió él sólo entre los años 2020 y 2022 alimentándose únicamente de latas de conserva frías, pasteles y teniendo que robar tomates y otras verduras a los vecinos. Vivía sin calefacción ni electricidad y tenía que dormir con tres edredones para no pasar frío.
Fueron los vecinos quienes llamaron a la Policía
Cuenta el medio que los vecinos le ayudaron un poco dándole algo de comer y que fueron ellos quienes, viendo las condiciones en las que vivía el menor, dieron aviso a la Policía.
Cuando los agentes llegaron vieron que el niño vivía solo y acudía todos los días a la escuela perfectamente aseado. De hecho, ni siquiera en la propia escuela se dieron cuenta de nada.
La Policía descubrió que la madre, Alexandra, tenía la custodia, pero vivía con su pareja en Sireuil, a cinco kilómetros de su hijo, al que visitaba de vez en cuando para llevarle comida, pero con el que no se quedaba a dormir ni le llevaba al colegio. En Sireuil, la casa de la pareja de la madre, los vecinos nunca vieron al niño.
El niño no quiere ver a su madre
La Justicia califica los hechos de "abandono de un menor comprometiendo su seguridad" mientras ha colocado al niño en una familia de acogida. El pequeño, que no quiere ver a su madre, confirma que primero había vivido con su hermano mayor y luego sólo durante dos años.
La madre niega lo ocurrido y asegura que el niño vivía con ella en Sireuil, según su abogada Émilie Lagarde. Sin embargo, el teléfono de ella demuestra que no llevaba al niño a clase, a lo que ella responde que se le olvidaba en casa.
Actualmente, el hijo reside con su familia de acogida y un educador lo ha definido como un niño "muy maduro, muy resiliente, autónomo, casi demasiado". La abogada de la parte civil teme "consecuencias dramáticas". "¡Este niño no tenía manera de lavarse con agua caliente! El cubo de basura esta lleno de pasteles y productos enlatados, ¡la madre debe comprender el daño que le ha hecho a su hijo!", sostiene el magistrado.
