El Covid-19 sigue circulando por España y la proliferación de las nuevas variantes de Ómicron BA.4 y BA.5 ha provocado un aumento de casos y hospitalizaciones en las últimas semanas.
El virus ahora es más contagioso y capaz de evadir la protección de los anticuerpos generados por la vacunación y las infecciones previas.
En concreto, las subvariantes BA.4 y BA.5 presentan una mutación en los aminoácidos L452R, F486V y R493Q, la parte de la proteína Spike del SARS-CoV-2 sobre la que actúan las vacunas.
Las mutaciones genómicas de BA.4 y BA.5 respecto a sus predecesoras son tan significativas que los expertos ya hablan de un nuevo virus:el Covid-22, muy distinto al que conocimos en 2019.
Tres síntomas clave diferentes a Ómicron
Al igual que evoluciona el virus, los síntomas también han ido cambiando, aunque suelen ser similares en todas las variantes.
La fatiga, la tos, la fiebre o el dolor de cabeza son dolencias comunes en las personas infectadas. Sin embargo, el Instituto Nacional de Enfermedades Transmisibles de Sudáfrica señala tres síntomas de las variantes BA.4 y BA.5 que las diferencian del linaje original de Ómicron (BA.1): diarrea, dolor de garganta y un periodo de incubación del virus más corto.
Otros síntomas de BA.4 y BA.5
- Fatiga o astenia
- Tos
- Fiebre
- Cefalea o dolor de cabeza
- Secreción nasal
- Mialgia o dolor muscular
- Anosmia y ageusia (falta de olfato y gusto)
- Disnea o falta de aire
- Vértigos