Con motivo de la pandemia mundial causada por el coronavirus y la derivada crisis económica que ha supuesto, las ONG están alertando del aumento de la pobreza infantil.
La mayor preocupación en este momento es el impago de alquileres, que aboca a muchas familias a buscar refugio en la calle. Las ayudas no alcanzan a colectivos que no se benefician del ingreso mínimo vital o a inmigrantes en situación irregular. Están aumentando, semana a semana, las colas del hambre.
Tal y como explica el presidente de la Fundación Madrín, Conrado Giménez: "Su primera necesidad es cubrir la alimentación, y ahora mismo estamos detectando, el último caso de una familia española con hijos, que llevaban una semana el padre y el hijo comiendo pan con agua".