El delincuente alemán Christian Brueckner habría pasado a ser el principal sospechoso del caso de Madeleine McCann tras haber pronunciado unas palabras a un antiguo amigo varios años antes de ser nombrado principal sospechoso del caso.
El diario 'Mirror' ha publicado que el sospechoso desde 2022, después de que saliera a la luz que había estado conduciendo por el complejo turístico de Praia da Luz en el momento en que la niña británica de tres años desapareció, habría pronunciado unas palabras condenatorias y por ello fue denunciado.
"Sí, no gritó"
Se cree que el amigo le denunció a la policía, después de que dijera las escalofriantes palabras: "Sí, no gritó", durante una conversación en la que se hacía referencia a la desaparición de Maddie.
El sospechoso actualmente cumple condena en Alemania por la violación y asesinato de una mujer de 72 años. Desde que salieron a la luz las acusaciones contra él, Brueckner ha mantenido su inocencia y ha escrito varias cartas condenando a la policía y a otros implicados en la investigación.
En una de ellas arremetió contra el informante clave y ex amigo Helge Busching, el que informó a la policía sobre las sospechosas palabras que Brueckner pronunció sobre Madeleine.
Helge Blusching habría dicho de Brueckner: "Yo estaba en el festival hippy de 2008 en España. Manfred (Seyferth, otro testigo) también estaba allí y Michael (Tatschl, otro testigo), Manfred, Christian y yo empezamos a hablar de Portugal".
"Fue entonces cuando Christian hizo un comentario sobre la chica desaparecida. Christian me preguntó si todavía iba a ir a Portugal, y yo le contesté: 'Ya no voy a Portugal porque allí hay demasiados problemas, Portugal tiene demasiada policía para mí a causa de la niña desaparecida'. Es extraño que haya desaparecido sin dejar rastro. Christian respondió: 'Sí, no gritó''".
Por su parte, Brueckner niega haber dicho esas palabras.