Según han explicado en rueda de prensa el teniente coronel de la Comandancia de Guadalajara, Pascual Segura, y el comandante Reina, de la UCO, el pasado día 22 de septiembre se emitió una orden internacional de detención que ayer, martes, fue ampliada con nuevos datos derivados de la investigación.
En la rueda de prensa han confirmado que la familia brasileña (un matrimonio con dos hijos, de 1 y 4 años) era "trabajadora y humilde" y no han concretado los motivos del asesinato y descuartizamiento ya que hay abiertas varias líneas de investigación.
El 17 de agosto fue el último día en el que el padre de familia acudió a trabajar, por lo que los investigadores barajan esa fecha como la de los asesinatos, que, no obstante, "se llevaron a cabo de forma secuenciada ya que el presunto asesino no se enfrentó a todas las víctimas a la vez".
Sobre la toma de declaración al presunto asesino, que sin embargo no fue detenido, el teniente coronel ha afirmado que "cada país tiene sus procedimientos legales y deberán ser ellos los que lleven a cabo esos pasos", y ha agregado que la colaboración con la policía brasileña es permanente y el supuesto autor estaría localizado.
No obstante, al no existir convenio de extradición de nacionales una vez detenido tendría que pedirse una comisión rogatoria para desplazarse allí el equipo de investigación, ya que el supuesto autor sería juzgado en Brasil, ha explicado Segura.