Los hechos, según relata el Ayuntamiento hispalense en una nota, tuvieron lugar a media tarde de este domingo, cuando una patrulla que circulaba por la zona del Cerro del Aguila fue requerida por un ciudadano que les explicó que había visto a un menor dentro un vehículo, sentado en el asiento del conductor y con las manos sobre el volante, algo que le pareció extraño.
El ciudadano le preguntó al menor, quien le explicó que se encontraba bien pero que tenía mucha sed y que, a pesar de que le habían dejado una botella pequeña de agua, ya la había casi consumido. Al parecer, un amigo de su padre se había marchado con una mujer y lo había dejado en el vehículo.
Los agentes permanecieron en el lugar de los hechos en torno a una hora y, tras realizar numerosas gestiones, consiguieron averiguar el domicilio del menor y contactar con su padre, informándole de lo sucedido.
Mientras tanto, un varón que superaba la treintena pasó por la zona y manifestó ser el propietario del vehículo, reconociendo que el menor es hijo de su amigo y que lo había dejado un momento para ir a comprar tabaco, si bien la cajetilla que mostró estaba casi vacía. Los agentes le informaron de la puesta en conocimiento judicial de todo lo sucedido y trasladaron al menor hasta su domicilio, donde quedó bajo la custodia de su padre.