La consellera de Servicios Sociales insiste en que su departamento ha actuado con la máxima diligencia con los despidos de los socioeducadores por conductas sexuales inapropiadas con los menores. No obstante reconoce que no hay garantías de que no vuelva a ocurrir.
Ante la petición de que dimita por parte de la oposición, Santiago recuerda que el Govern no tiene autoridad administrativa en los centros que gestiona el Consell de Mallorca tras conocerse los 16 casos de explotación sexual. Fina Santiago critica que la fiscalía no se haya implicado en resolver esta problemática.