La cantante colombiana Shakira fue protagonista de una polémica judicial en España, acusada de defraudar 14,5 millones de euros entre 2012 y 2014. La Fiscalía pedía una pena de ocho años de prisión y una multa de más de 23 millones de euros por seis delitos de fraude contra la Hacienda pública.
Finalmente, la artista llegó a un pacto con la fiscalía y aceptó el pago de una multa millonaria a cambio de una rebaja de condena que evitará su entrada en prisión.
Así fue la investigación de la Agencia Tributaria
La Agencia Tributaria llevó a cabo una minuciosa investigación. Durante más de dos años, Hacienda recopiló pruebas para demostrar que la cantante vivió en España entre 2012 y 2014, años en los que no presentó la declaración de la renta.
Los inspectores rastrearon la vida de Shakira en Barcelona, comenzando por su peluquero, a quien visitaba casi semanalmente. Además, frecuentaba un centro de estética, un gimnasio y tomaba clases de zumba.
Entre las pruebas de que vivía en España se encuentra una demanda judicial interpuesta por dos de sus empleados, quienes alegan jornadas laborales de hasta 17 horas consecutivas y un ambiente de trabajo tenso. La Fiscalía también ha descubrió un complejo entramado empresarial que sugiere que Shakira podría haber utilizado empresas offshore para eludir impuestos.
Las pruebas de Equipo de Investigación
‘Equipo de Investigación’ accedió a pruebas gráficas y documentales que, para el fisco, probarían que la artista permaneció más de 183 días durante cada uno de esos años en España, los necesarios para considerarla residente fiscal.
Fotografías de paparazzis, redes sociales, denuncias, facturas y tarjetas de crédito, visitas a centros de belleza, billetes de avión y hasta los testimonios de los fans, ayudaron a los investigadores de Hacienda a componer un rompecabezas a modo de calendario reconstruido y analizado detalladamente por el programa.
Los reporteros del programa localizaron a empleados de Shakira y otros testigos directos de su día a día en la ciudad condal.
El programa viajó también hasta Barranquilla, Colombia, para hablar con su descubridor.
Allí comenzó una trayectoria que ha terminado convirtiendo a Shakira en una de las cantantes mejor pagadas del mundo, con una fortuna que se calcula en más de 300 millones de dólares, gestionada a través de un entramado societario con sede en paraísos fiscales que el programa de Gloria Serra investiga y pone al descubierto.
Dicha estructura habría servido, según la Fiscalía, para eludir la tributación de las rentas percibidas procedentes de su actividad profesional y de sus derechos de imagen.