La última quincena de este mes, el tramo final del verano meteorológico -que va del 1 de junio al 31 de agosto-, se prevé más cálido de lo normal, con la posibilidad de una nueva ola de calor -la cuarta- que podría azotar el país a partir del fin de semana debido a la llegada de una masa de aire cálida, disparando de nuevo los termómetros en gran parte del territorio y el riesgo de incendios.
A lo largo de la recta final de esta semana el tiempo tendrá "características plenamente veraniegas", con calor intenso el jueves y el viernes en los tercios norte y este de la Península, según el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Rubén del Campo.
Llega a España una masa de aire muy cálido
Como consecuencia de la llegada de una masa de aire muy cálido, junto con la presencia de altas presiones sobre España, a partir del sábado "las temperaturas subirán todavía más y el calor se extenderá a la mayor parte del país, dando lugar a un episodio cálido desde el domingo".
Aunque aún es pronto para definir el episodio como una nueva ola de calor, según Del Campo, durante tres días, las temperaturas tanto máximas como mínimas "serán muy altas para la época del año" y estarán entre 5 y 10 grados por encima de lo normal en amplias zonas del territorio, pero sin llegar a los valores de la tercera ola de calor de la semana pasada.
De manera casi generalizada en el interior peninsular y también en Baleares las temperaturas superarán los 35 grados, y nuevamente será difícil conciliar el sueño, con "noches tropicales" en las que los termómetros no descenderán de los 20 grados en amplias zonas.
Pero la peor parte se registrará en puntos del área mediterránea y del interior del centro y del sur peninsular, donde las noches tórridas dejarán registros de hasta 40 grados.
Según el portavoz de la Agencia, la masa de aire cálido puede venir acompañada de polvo en suspensión, lo que provocará una peor calidad del aire.
Pocas lluvias y riesgo extremo de incendios
En relación a las precipitaciones, según Del Campo, las condiciones anticiclónicas van a propiciar en general, un tiempo seco y soleado, por lo que serán bastante escasas, aunque un frente afectará al oeste de Galicia.
Esta situación de escasas precipitaciones, junto a las altas temperaturas, el ambiente seco y una vegetación ya muy seca a mediados de agosto, forman un conjunto perfecto de factores para aumentar el "riesgo de incendios, que será muy alto o extremo".
Según las cifras del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, del 1 de enero al 6 de agosto de 2023 se han quemado 64.512,87 hectáreas de superficie forestal y se han registrado 17 grandes incendios, es decir de más de 500 hectáreas.
De acuerdo a los datos del Sistema Europeo de Información sobre incendios forestales (Effis, por sus siglas en inglés), solo en agosto, en España se han calcinado 1.689 hectáreas, siendo el peor fuego el de Girona (541 hectáreas), seguido por Huelva (430) y Cáceres (292).
Y aunque el mapa de riesgo de incendios este jueves ha reducido las zonas en rojo intenso, la situación va a ir empeorando sobre todo el martes y miércoles de la próxima semana, cuando prácticamente toda España tendrá un riesgo extremo de incendios, salvo algunas zonas de Galicia occidental.
