A un día del 8M y un mes desde que el PSOE registró en el Congreso su propuesta para cambiar la ley del 'Sólo sí es sí' para aumentar las penas a los violadores ante las rebajas que supuso que esta norma entrase en vigor, el Pleno del Congreso ha aceptado tramitar la proposición de ley del PSOE para reformar la ley con el voto a favor del PSOE y del PP y el voto en contra de Unidas Podemos, incluyendo el de la ministra de Igualdad, Irene Montero y el de Yolanda Díaz. Vox finalmente se ha abstenido.
El Congreso ha aprobado reformar la ley del solo sí es si con 231 votos a favor; 58 abstenciones y 56 votos en contra. La proposición de ley del PSOE inicia ahora su trámite de discusión y enmiendas. En concreto, la admisión a trámite de la reforma socialista ha recabado el apoyo del PSOE, PP, Ciudadanos, PNV, PDeCAT, CC, Navarra Suma, Foro Asturias y el PRC, mientras que otros 58 se han abstenido: los de Vox y los de Junts, Más Pais-Equo y Compromís.
En contra de la reforma se han posicionado 56 diputados de Unidas Podemos, Esquerra (ERC), Bildu, el BNG, la CUP y el exdiputado de Ciudadanos Pablo Cambronero.
Ruptura en el Gobierno
El Gobierno de coalición ha escenificado este martes su fractura en el pleno del Congreso ante la reforma de la ley del solo sí es sí, iniciativa socialista apoyada por el PP que ha roto al bloque de la investidura y que ha generado un agrio debate en el hemiciclo.
"Estamos cansadas de sus peroratas, señorías de Unidas Podemos", "dejen la hipérbole y hablemos de soluciones, es lo maduro y lo serio. Cuando se trata de cuestiones de tanta relevancia, no importa el con quién, sino el para quién", ha manifestado desde la tribuna la portavoz socialista, Andrea Fernández.
Desde Unidas Podemos, Lucía Muñoz ha llamado a todas las feministas a "inundar" este 8 de marzo las calles para "decirles alto y claro a los fascistas" que no van a permitir que se les arrebaten sus derechos y "gritar alto y claro que solo sí es sí". "Este fue el grito de miles de mujeres en las calles que hoy ustedes traicionan", ha advertido al PSOE, que "le están dando la espalda a todas las mujeres de este país".
La soledad de Montero y Belarra
La imagen del desencuentro entre la parte socialista y la formación morada ha sido clara porque solo dos ministras han estado presentes en el hemiciclo; la titular de Igualdad, Irene Montero, y la líder de su partido, Unidas Podemos, y la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, que han escuchado juntas cómo la mayoría del hemiciclo apostaba por elevar las penas de la ley tras más de 700 rebajas de condenas a agresores sexuales.
720 revisiones a la baja y las más de 70 excarcelaciones
Desde que entró en vigor la ley, el pasado 7 de octubre de 2022, esta ley ha provocado 720 revisiones a la baja y las más de 70 excarcelaciones de violadores. Aun con estos datos sobre la mesa, desde la parte morada del Gobierno -impulsora de esta ley-, defienden que "solo uno de cuatro juzgados esté aplicando estas rebajas. Hay cientos de fiscales que no lo hacen. Cuando las cifras del Consejo General del Poder Judicial sean definitivas, veremos que bajará el número rebajas de pena y las excarcelaciones", ha asegurado la secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género, Ángela Rodríguez.
Ante la ola de rebajas de penas y excarcelaciones y el posible coste electoral para el PSOE, la parte socialista del Gobierno decidió registrar en el Congreso su propuesta para cambiar la ley del 'Sólo sí es sí' y aumentar las penas.
Igualdad viene asegurando en estas semanas que han presentado a sus socios de gobierno más de 10 propuestas en las que se contemplaba el incremento de las penas y "la ministra de Justicia nos decía que entonces se disparaban" y denuncian que no han sido tomadas en cuenta.
Este fin de semana la formación morada anunció que votaría contra la proposición de ley socialista en su primer trámite parlamentario por no haber ese acuerdo.
Podemos cree que la reforma del PSOE es el código penal de La Manada
El portavoz de Podemos, Pablo Echenique, también ha dicho que el PSOE votaría con la derecha volver a lo que ellos llaman "el código penal de la Manada". Aunque se pusieron como condición que Igualdad estuviera de
acuerdo con la reforma, en el PSOE creen que la actitud de Irene Montero no ha favorecido el acuerdo.
Irene Montero ha defendido todo este tiempo que la reforma del PSOE era volver a la violencia y la intimidación como elementos para calibrar el castigo y no el consentimiento, que es la clave en la nueva ley para juzgar los presuntos delitos sexuales. La mujer debe dar su consentimiento expreso (de ahí viene el solo sí es sí) o en caso contrario se puede considerar agresión.