La población de abejas y otros insectos polinizadores está en declive desde hace décadas debido a que cada vez hay más producción agrícola en monocultivos y se hace un uso excesivo de plaguicidas. Mediante estas prácticas se busca hacer más rentable la creación de alimento, pero reducen el acceso de las abejas a la comida y lugares de anidación. Además como ha instado la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) las exponen a "sustancias químicas nocivas que debilitan su sistema inmunitario".
El 20 de mayo de 2017 la ONU creó el Día Mundial de la Abeja para concienciar a la población de la importancia de este insecto. Porque, como explica la organización, desempeñan un "papel vital" en la supervivencia de los sistemas y el incremento de la biodiversidad, por lo que es necesario "promover acciones que protejan a los polinizadores y sus hábitats". Además, la FAO recuerda que estas diminutas criaturas aseguran con su trabajo "la reproducción de muchas plantas, apoyando la regeneración de los bosques y mejorando la cantidad y calidad de la producción agrícola".
El 75% de los cultivos alimenticios dependen de la polinización
Las abejas y sus compañeros polinizadores son responsables de que sobrevivan el 75% de los cultivos de alimentos. Una cifra que se eleva hasta el 90% en el caso de las plantas silvestres con flores. Por ello, la ONU pide promover "acciones que protejan a los polinizadores y sus hábitats" mediante la adopción de prácticas agrícolas sostenibles, la reducción del uso de insecticidas y la creación de hábitats para especies como las abejas cerca de las zonas de cultivo.
En la agricultura, aproximadamente un tercio de los alimentos que se producen se benefician de la polinización animal y las mayores contribuyentes son las abejas. Se calcula que el valor de los cultivos mundiales que dependen de la polinización es de entre 236 000 y 577 000 dólares anuales.
En peligro de extinción
Casi el 35% de los polinizadores invertebrados está en peligro de extinción. Según un estudio de Scientific Reports, Estados Unidos perdió durante el invierno de 2006 y 2007 el 90% de sus colonias. Mediante la creación del Día Mundial de la Abeja, la ONU busca proteger a las abejas y otros polinizadores para que puedan contribuir a resolver los problemas relacionados con el suministro de alimentos en el mundo y acabar con el hambre en los países en desarrollo. Es de vital importancia controlar su declive y detener la pérdida de su biodiversidad.
