Según la Sociedad de Endocrinología, Diabetes y Nutrición, la sudoración es esencial para regular la temperatura del cuerpo. Cuando la temperatura corporal aumenta, el cerebro envía señales a las glándulas sudoríparas para producir sudor.
Al evaporarse, la piel se refresca, y esto ayuda a reducir la temperatura corporal. No obstante, aunque sudar es una respuesta natural, si ocurre de manera excesiva o sin razón evidente, podría ser síntoma de condiciones como la diaforesis y podría requerir atención médica.
María Ángeles Gálvez, coordinadora del Área de Neuroendocrinología de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), define la diaforesis como una sudoración excesiva que puede ser generalizada, por todo el cuerpo, o localizada en manos o pies.
Además, continúa la experta, en determinadas circunstancias, cuando la diaforesis aparece en un episodio que produce intenso malestar, la sudoración puede no acompañarse de acaloramiento sino de sensación de frío. "En la menopausia es cuando esta sensación de sudor frío ocurre con más frecuencia", cuenta Gálvez. "Se produce una alteración en la percepción de la temperatura corporal, en la que alterna una intensa sudoración (sofocos), con episodios de fuerte percepción de frío", continúa.
De acuerdo con la especialista, son varias las causas que pueden presentar esta sudoración fría abundante.
- Causas fisiológicas: menopausia, temperaturas cálidas y actividad física.
- Causas infecciosas: fiebre, infecciones del sistema nervioso central, malaria o paludismo y tuberculosis.
- Causas psicológicas: miedo, ansiedad o estrés.
- Patologías endocrinológicas: el hipertiroidismo (que se suele acompañar de sensación de calor), la acromegalia (enfermedad causada por un aumento de la hormona de crecimiento), el feocromocitoma (con un aumento de la secreción de catecolaminas), el hipogonadismo (por falta de testosterona en el hombre o de estrógenos en la mujer) o las hipoglucemias (en un paciente diabético insulinodependiente. El sudor frío es una de las principales señales de advertencia)
- Otras causas: cafeína, comidas muy condimentadas o consumo de medicamentos (antidepresivos, medicamentos utilizados durante un tratamiento de quimioterapia, algunos analgésicos o medicamentos hormonales).
El riesgo de tener sudores fríos
Maria Ángeles Gálvez explica que la diaforesis repetida produce una calidad de vida negativa, ya que "una sudoración excesiva puede interferir con las actividades diarias como escribir o conducir". También, con frecuencia, cuenta la experta, se ve afectado el descanso nocturno y esto repercute en el rendimiento físico e intelectual. De la misma manera, esta condición puede tener efectos negativos en el estado de ánimo.
En cuanto al tratamiento, la coordinadora de la SEEN cuenta que, si la causa de la diaforesis es una enfermedad endocrinológica, el tratamiento de cada patología solucionaría el problema.
Sin embargo, en el caso de la menopausia, el tratamiento hormonal con estrógenos resuelve la diaforesis. "Las guías de práctica clínica más recientes ponen de manifiesto que muchos de los efectos deletéreos que se habían atribuido al tratamiento hormonal sustitutivo en la menopausia, no son ciertos. Por lo que se puede usar en muchos casos sin peligro", concluye Gálvez.