Madrid |
Los casos de Covid-19 en España han descendido en las últimas semanas, sin embargo la cifra de fallecidos sigue siendo preocupante. En total, se han registrado 2.719 muertes más por covid-19 en el último mes, de las que 236 tienen se han producido en la última semana.
La incidencia en los mayores de 59 años ha caído en casi 1.000 puntos, hasta 283, al igual que la ocupación hospitalaria, que se sitúa en el 4,6 %, menos de la mitad que el pasado 12 de julio.
Estos datos indican que, aunque la propagación del virus se ha frenado, muchos pacientes siguen muriendo a causa de la enfermedad, motivo por el que debemos seguir protegiéndonos del virus y aislándonos en el caso de confirmar el contagio.
La mejor forma de saber si estamos infectados son las pruebas de autodiagnóstico. Sin embargo, con la aparición de las subvariantes de Ómicron, algunos pacientes han observado cómo al hacerse un test de antígenos el resultado ha sido negativo, a pesar de presentar síntomas compatibles con la infección. ¿Por qué ocurre esto?
Uno de los motivos que explica el fenómeno de positividad retrasada es que con los sublinajes BA.4 y BA.5 -predominantes en nuestro país- se ha reducido elperiodo de incubación, lo que implica que el sistema inmune tarda menos en reaccionar al virus y, por tanto, los síntomas aparecen antes: congestión nasal, fiebre, fatiga...
Así, si el periodo de incubación de la variante Alpha era de 5 a 7 días y con Delta se redujo a cuatro días, con Ómicron, el periodo entre la infección y la aparición de los síntomas se acortó aún más aún y es de tan solo tres días, según ha informado la agencia de seguridad sanitaria del Reino Unido.
Las vacunas son un factor determinante en este cambio. Antes, los síntomas aparecían cuando la carga viral estaba alcanzando su pico, pero las vacunas hacen que nuestro cuerpo detecte el virus más rápido y lo neutralice antes de que se desarrolle por completo. Esto explica quelos síntomas ahora sean más leves y duren menos.
Los test antígenos que compramos en las farmacias son sensibles a una carga viral determinada y, si se acorta el periodo de incubación y los síntomas aparecen antes, la carga viral no será lo suficientemente alta como para ser detectada por una prueba de este tipo.
Por ello, los expertos aconsejan que si se tienen síntomas compatibles con la Covid-19 y el test da negativo, repitamos la prueba al día siguiente y también 48 horas después, es decir, durante varios días, ya que el positivo puede dar la cara más tarde que los síntomas.