"La narrativa tecnológica esconde el impacto real para el medioambiente del uso de Internet" han asegurado los expertos en sostenibilidad digital Pablo Gámez y Esther Paniagua, ya que apenas un 5,6% de la población española afirma conocer en profundidad la contaminación que genera la red.
El dato figura en el estudio sobre bienestar digital de ING que incluye una encuesta realizada en distintos puntos de España sobre el cual han debatido diversos especialistas del sector en una jornada que ha abordado la contaminación digital este jueves, justo cuando se conmemora el Día Mundial de la Salud Ambiental.
"Internet no es algo etéreo, como esa narrativa nos ha hecho pensar" recuerda Paniagua, sino más bien "un entramado de cables y tecnología altamente contaminante" que, además de producir miles de toneladas de Co2 y metano, genera "una huella hídrica mayúscula" ya que "cada giga de descarga consume 200 litros de agua potable", necesarios para refrigerar los servidores.
A la hora de buscar soluciones a este tipo de contaminación, la experta se ha referido a la falta de políticas públicas que deberían reconducir la situación, debido a que "regular Internet no da votos", y ha denunciado que además no hay suficiente "presión social" al respecto.
Consumo de recursos
Gámez, colaborador en informes de la ONU sobre el uso digital, ha puesto el foco en la desigualdad de las repercusiones medioambientales entre el sur y norte global y ha recordado que "aunque el norte es el que más se enriquece con el desarrollo tecnológico, el sur es el que pone los materiales" a través de prácticas como la minería intensiva y la deforestación.
"Un teléfono móvil en el 2021 utilizaba más de 36 elementos de la tabla periódica..., en este momento son más", ha precisado, tras comprobar en un nuevo estudio en el que se encuentra trabajando que a día de hoy "cada vez se utilizan más elementos de la tabla periódica" para confeccionar prácticamente los mismos dispositivos.
La contaminación digital derivada del uso de internet y los aparatos electrónicos contribuye a que sólo un 10% de los españoles consultados considere disponer de un buen bienestar digital y también mental y una "gran mayoría de gente siente que tiene margen de mejora" en este aspecto.
Algunos datos
El estudio actualiza una primera versión del informe presentado el pasado mes de julio en el que ya se adelantaba que "si Internet fuera un país estaría entre el tercero y sexto más contaminantes" del planeta, que 4 horas viendo vídeos en el dispositivo móvil contamina lo mismo que un coche recorriendo 50 kilómetros o que enviar un correo electrónico con un archivo adjunto equivale a dejar una bombilla encendida durante 24 horas.
La encuesta incluida ahora indica que más del 54% de las personas consultadas reclama un protocolo de desconexión digital laboral y que, si bien un 63% cree "fundamental" apagar el teléfono móvil "en momentos clave" sólo un 39% lo hace habitualmente.
