El primer caso de polio en Estados Unidos en una década ha hecho saltar las alarmas. Las autoridades sanitarias lo han comunicado en el condado de Rockland, estado de Nueva York, donde ya se ha pedido a los residentes extremar la vigilancia en un comunicado del Departamento de Salud estatal.
Se trata de una enfermedad muy contagiosa y cuyo último caso se detectó en EEUU en 2013. En aquella ocasión ya se trató como excepcional, pues el polio se consideraba erradicado en 1979 después de una campaña nacional de vacunación en los años 50 y principios de los 60. Actualmente, forma parte del sistema obligatorio de vacunación infantil en el país.
Polio: ¿qué es y cómo se contagia?
La poliomielitis, conocida como polio, es una enfermedad vírica que afecta al sistema nervioso y causa debilidad muscular, por lo que puede verse afectada la médula espinal. Entra en el cuerpo generalmente por vía oral, casi siempre transportado por manos que han estado en contacto con materia fecal de una persona infectada.
Es más común entre bebés y niños pequeños y se da con más frecuencia en condiciones malas de higiene. La páralisis se presenta de forma más severa cuando la infección ocurre en personas mayores.
Una vez en el cuerpo, los pacientes son más contagiosos en un plazo de siete a diez días después de la aparición de los síntomas, aunque una persona sigue siendo potencialmente contagiosa si el virus sigue presente en garganta y heces, según datos del Departamento de Salud de Nueva York. Así, el virus puede aguantar alrededor de una semana y seguir presente en las heces de tres a seis semanas.
¿Cuáles son los síntomas de la polio?
El Departamento de Salud de Nueva York afirma que hasta el 95% de los infectados con polio no presentan síntomas, aunque siguen siendo potencialmente contagiosos.
Entre el 4% y el 5% de pacientes muestra estos síntomas menores:
- Fiebre
- Dolor muscular
- Náuseas
- Vómitos
Otros casos, entre el 1% y el 2%, desarrollan estos síntomas más serios:
- Dolor muscular severo
- Rigidez en el cuello y la espalda
Por último, menos del 1% de los contagiados resultan en parálisis.
Tratamiento y vacuna contra la polio
Actualmente no hay cura para la polio, por lo que el tratamiento se basa en luchar contra los síntomas. Con respecto a la vacuna, hay de dos tipos: la Trivalent, que se ingiere, y la inactivada (IPV), que se inyecta. La oral no se recomienda para inmunizar desde hace dos décadas.
Después del primer caso detectado en una década, Salud de EEUU ha recomendado encarecidamente la vacunación a las personas llegadas de otras latitudes, o que por alguna razón no completaron el ciclo entero de vacunas, y para tal fin se va a abrir un centro en el mismo condado de Rockland.